Un cuadro de Hitler hecho por mí. Hitler, el artista. El que deseaba ser pintor... El que tenía técnica pero no creatividad. El joven virtuoso; no el adulto corrupto -del latín "corruptus", que significa "corazón roto"-. Hitler, el que fue rechazado dos veces por Bellas Artes. Hitler, el que pudo ser y nunca será.